Gabriel Attal : Defensor de la laicidad y la lucha contra la radicalización en las escuelas francesas

El ministro Attal y el presidente Emmanuel Macron están en sintonía con este tema. "El Ministerio de Educación no debe bajar los brazos en la prevención de la radicalización. Y para los estudiantes que ya se han radicalizado, debemos poder sacarlos y encontrar una solución diferente", explicó el jefe de Estado durante un intercambio informal con su ministro, quien comparte plenamente este punto de vista. Desde su nombramiento, Attal toma muy en serio esta cuestión de la laicidad en la escuela en relación con el islam radical, según informa Le Parisien.

Antes de aceptar su nombramiento, el ministro treintañero puso dos condiciones a Macron : revisar el calendario del bachillerato y aclarar definitivamente la cuestión de las abayas. "Adelante. Te apoyaré totalmente", asintió su jefe. Un mes después de asumir el cargo, Attal pasa a la acción. Emite una circular prohibiendo las abayas y los qamis en los centros escolares. Una medida controvertida que ha generado mucha polémica. Pero la píldora se ha tragado. "Es un asunto resuelto", afirma el ministro.

"Lo asumo : en mi trayectoria escolar y en mis funciones de representante local, nunca me había enfrentado a esta realidad. Solo entendía poco su intensidad. Fueron los desplazamientos sobre el terreno, los intercambios con los actores implicados, los que me permitieron tomar plena conciencia de ello", confiesa el ministro, quien ha intercambiado sobre el tema con los directores de centros y expertos, entre ellos el investigador Hugo Micheron y el rector de la mezquita de París. "Mi tema es la escuela, no estoy aquí para pronunciar un discurso general sobre el islam", matiza.

Y añade : "No tomo ninguna medida contra el islam, tomo medidas a favor de la laicidad. Si las infracciones a la ley de 2004 hubieran provenido de otra religión, habría tenido exactamente la misma reacción". Attal espera el retorno de los prefectos y rectores a quienes ha pedido un recuento preciso de los estudiantes identificados como radicalizados para, según sus palabras, "sacar" a aquellos considerados potencialmente peligrosos de los centros "construyendo un marco ad hoc".