Sáhara Occidental : La clave de Trump para desbloquear el conflicto más largo de África

Said
Sáhara Occidental : La clave de Trump para desbloquear el conflicto más largo de África

El conflicto del Sáhara Occidental, que se prolonga desde hace décadas, podría experimentar una evolución significativa. La coyuntura, marcada por un acercamiento de las posiciones de algunos actores clave, ofrece una ventana de oportunidad a la próxima administración estadounidense para involucrarse en la búsqueda de una solución definitiva.

El sitio de análisis 19FortyFive, especializado en asuntos de política exterior y seguridad nacional, ha publicado un informe titulado "Romper el impasse... Un marco estratégico para resolver el conflicto del Sáhara".

Este documento, redactado por Amine Ghoulidi, investigador de la Universidad británica de King’s College, examina la posibilidad de que la próxima administración estadounidense desempeñe un papel en la resolución de este conflicto prolongado. Según el informe, el reciente acercamiento de las posiciones de Francia y España crea un contexto que merece especial atención.

El informe sostiene que la resolución del conflicto del Sáhara podría permitir a Estados Unidos avanzar en tres ejes estratégicos. En primer lugar, limitar la expansión de la influencia china en una zona importante entre el Mediterráneo y el Atlántico. En segundo lugar, reafirmar la influencia estadounidense en zonas disputadas. En tercer lugar, fortalecer los vínculos con socios confiables. El documento señala que la inacción podría, por el contrario, favorecer los intereses chinos en la región, dada la intensificación de las asociaciones económicas y de seguridad de China en el norte de África.

El informe señala que el reconocimiento por parte de Estados Unidos de la soberanía marroquí sobre el Sáhara ha modificado el panorama. La posición reciente de Francia, por su parte, ha contribuido a la emergencia de cierto consenso entre los miembros del Consejo de Seguridad, lo que podría facilitar una paz duradera. Según el documento, una solución basada en los marcos políticos actuales es una posibilidad a considerar, que podría generar un impulso para iniciativas regionales más amplias. El plan de autonomía de Marruecos se presenta como una base de solución que gana reconocimiento, a diferencia de opciones consideradas irrealistas como la partición.

El informe destaca el consenso actual entre actores clave como Francia y España como un factor a tener en cuenta. Mauritania, socio de Occidente y cercana a Francia, podría potencialmente unirse a este consenso. La convergencia de estos actores, que tienen un interés en la estabilidad de la región, constituye un elemento a no descuidar.

El informe también subraya que el potencial económico y estratégico de la región sigue siendo en gran medida inexplorado. La competencia entre las potencias mundiales, en particular Rusia y China, por una mayor presencia en la región, incluyendo el Sáhara, complica la situación. La creciente influencia de Irán en la región, a través de sus vínculos con el Polisario, también se menciona. Frente a la expansión de la influencia económica china en Marruecos, se insta a Estados Unidos a definir una orientación estratégica.

El documento sugiere una transición de los mecanismos multilaterales a los mecanismos bilaterales. Esto podría incluir el fin de la misión MINURSO, considerada poco productiva, y el reemplazo del Enviado Personal del Secretario General de las Naciones Unidas para el Sáhara por esfuerzos diplomáticos estadounidenses más directos.

También se menciona un enfoque moderado hacia Argelia. Se trataría de encontrar un equilibrio entre el reconocimiento de sus ambiciones regionales y la necesidad de un comportamiento responsable. Se presentan las negociaciones directas, lideradas por Estados Unidos, como una alternativa a los esfuerzos multilaterales anteriores. El estatus de Argelia como potencia regional, debido a su tamaño y recursos, debe tenerse en cuenta, al tiempo que se le alienta a adoptar una actitud responsable. Simultáneamente, Estados Unidos debería alentar a Marruecos a presentar un plan detallado y realista para la implementación de su iniciativa de autonomía.