Ramadán y diabetes : cómo ayunar de forma segura bajo supervisión médica

Riesgos de hipoglucemia e hiperglucemia

De hecho, el ayuno perturba los equilibrios metabólicos, exponiendo a los diabéticos a peligros potenciales. La hipoglucemia, disminución del nivel de azúcar en la sangre, representa un riesgo importante, especialmente si el tratamiento no se ha adaptado previamente por un médico.

La hiperglucemia, por el contrario, puede ocurrir por la noche al romper el ayuno. Una comida demasiado abundante, rica en calorías, puede generar una glucemia elevada, acompañada de una sed intensa y un aumento de la micción, favoreciendo la deshidratación.

Adaptar la alimentación e hidratarse

Para minimizar los riesgos, los diabéticos deben adoptar una alimentación equilibrada repartida en dos o tres comidas al romper el ayuno. Dar prioridad a las fibras (frutas, verduras, dátiles, pan, cereales y sopas) es esencial, mientras que los dulces y los frutos secos (cacahuetes, pistachos, etc.) deben consumirse con moderación.

La hidratación también es un elemento crucial. Beber en abundancia es vital para los ayunantes diabéticos, que deben priorizar el agua, las sopas, las infusiones y los tés.

Precauciones y seguimiento médico

Para prevenir cualquier debilitamiento, se recomienda evitar la exposición al sol y al calor durante el ayuno. Del mismo modo, los esfuerzos físicos deben reducirse al mínimo, excepto una pequeña caminata diaria.

Durante este período, los médicos endocrinólogos recomiendan un seguimiento glucémico regular y sistemático. Las personas en riesgo, como los ancianos, las mujeres embarazadas y los pacientes con hipertensión o asma, deben informar obligatoriamente a su médico ante la aparición de cualquier síntoma sospechoso.

Atención :

• El ayuno está contraindicado para las personas diabéticas en tratamiento con insulina.
• Consultar al médico es indispensable antes de emprender el ayuno.
• Se necesita una vigilancia estrecha de la glucemia durante el Ramadán.
• Adaptar la alimentación e hidratarse correctamente son medidas vitales.
• Las personas en riesgo deben estar particularmente atentas.