La polémica expansión de palmeras en Marruecos : ¿Belleza urbana o desastre ecológico ?

Las autoridades de las grandes ciudades como Casablanca, Rabat, Tánger, Marrakech, Agadir y Fez, siguen plantando palmeras en las calles, ignorando los llamamientos de las asociaciones de defensa del medio ambiente que piden poner fin a esta práctica con efectos devastadores sobre el medio ambiente.

Las asociaciones no han dejado de instar a las autoridades a plantar árboles que ofrezcan sombra a los habitantes y belleza a la ciudad, en lugar de las palmeras cuyo precio de una planta a veces supera los 10.000 dírhams. Sin embargo, los responsables hacen oídos sordos a estos llamamientos, y siguen plantando palmeras en plena ciudad.

Esta práctica es un "crimen medioambiental", afirman los expertos, estimando que las palmeras no tienen su lugar en la ciudad, sino más bien en las zonas desérticas y los oasis. Añaden que las palmeras plantadas en las zonas costeras acaban muriendo, mientras que se han comprado a precios elevados, denunciando un derroche de recursos públicos.