Nueva directiva europea amenaza las transferencias de marroquíes en el extranjero y sacude al sector bancario

En una nueva nota de análisis, BMI-Fitch Solutions subraya que la aplicación de esta directiva europea preocupa ciertamente a los bancos marroquíes presentes en Europa, pero aún más a Bank Al-Maghrib y al gobierno marroquí, debido a sus efectos sobre las transferencias de los marroquíes residentes en el extranjero (MRE) que contribuyen a la estabilidad financiera y económica del reino. Esta directiva del 31 de mayo de 2024, se publicó en el "Diario Oficial de la UE" el 19 de junio de 2024 y entró en vigor el 10 de julio de 2024. Los Estados miembros de la UE tienen hasta el 10 de enero de 2026 para transponer este texto comunitario a su legislación nacional. La CRD6 impone a los bancos de países terceros un marco regulatorio unificado y más estricto. Así, las sucursales de bancos extranjeros con sede en la UE estarán ahora sujetas a las mismas normas y no al derecho nacional de cada Estado miembro, recuerda Le Matin.

Los bancos marroquíes presentes en la UE se verán afectados por este cambio. Según los expertos de BMI-Fitch Solutions, las sucursales extranjeras consideradas más sensibles deberán soportar obligaciones más estrictas en caso de falta de equivalencia regulatoria con la UE. La directiva europea también otorga a los reguladores europeos el poder de imponer la conversión de sucursales en filiales en caso de riesgo para la estabilidad financiera o de superación de umbrales de activos (10 mil millones de euros en un Estado miembro, 40 mil millones a escala de la UE). Los bancos marroquíes también deberán hacer frente a un aumento significativo de sus costos de cumplimiento (rediseño de los sistemas internos, inversiones en nuevas tecnologías de informes y reestructuración de sus actividades europeas).

"A corto plazo, creemos que estas medidas aumentarán el riesgo estratégico y podrían dañar su reputación en caso de dificultades de implementación. Sin embargo, una ventaja potencial radica en la armonización de las reglas a través de varios mercados europeos, lo que podría, a la larga, facilitar la expansión transfronteriza, a pesar de los desafíos financieros y estructurales iniciales", analizan los expertos de Fitch. Por otra parte, la directiva amenaza las transferencias de los MRE hacia Marruecos, estimadas en 117,7 mil millones de dírhams en 2024 frente a 115 mil millones el año anterior. Las autoridades marroquíes temen que el aumento de los costos de cumplimiento en Europa lleve a algunos bancos marroquíes a abandonar los mercados europeos, lo que podría reducir considerablemente el flujo de transferencias de los MRE.

Es para limitar estos impactos que Bank Al-Maghrib, en colaboración con los ministerios y los bancos involucrados, ha establecido un grupo de trabajo para defender los intereses marroquíes ante la UE y cada país europeo involucrado. Una reunión bilateral con el Tesoro francés, prevista para el pasado julio, debía permitir finalizar un acuerdo sobre la implementación de la directiva. Pero hasta la fecha, no se ha anunciado ningún acuerdo definitivo. Según Fitch Solutions, el crecimiento económico de Marruecos debería alcanzar el 4,5% en 2025, después de un aumento del PIB del 4,8% en el primer trimestre. Podría situarse en el 4,8% en 2026, impulsado por unas condiciones de crédito más favorables y la esperada recuperación de la demanda europea.