Notarios marroquíes, impotentes ante la evasión fiscal : La falta de cuentas profesionales obstaculiza la recaudación

Sylvanus
Notarios marroquíes, impotentes ante la evasión fiscal : La falta de cuentas profesionales obstaculiza la recaudación

En Marruecos, los adules (notarios) se ven limitados en su papel en la recaudación fiscal a favor del Tesoro Público debido a una brecha que abre la puerta a la evasión fiscal.

Los profesionales del notariado no pueden recaudar directamente los impuestos adeudados en las transacciones inmobiliarias durante la celebración de los contratos, en particular a través del "Aviso a Terceros Tenedores" (ATD) aplicado a través de cuentas profesionales. La persistente ausencia de cuentas de depósito profesionales que les permitan colocar los fondos de sus clientes en la Caja de Depósitos y Gestión (CDG) limita así su papel en la recaudación fiscal a favor del Tesoro Público. Una brecha que abre la puerta a la evasión fiscal. Según Abdellatif Jaid, presidente del Consejo Regional de Adules ante la Corte de Apelación de Casablanca y presidente de la Comisión de Asuntos Científicos y Jurídicos de la Instancia Nacional de Adules, la persistencia de los pagos en efectivo en la mayoría de los actos autenticados por los adules es una práctica "peligrosa para la economía nacional". Según las estadísticas del Banco Al-Maghrib (BAM), la masa monetaria fiduciaria en circulación ya representaba el 30% del producto interno bruto, es decir, 437 mil millones de dírhams a finales de marzo pasado, recuerda a Hespress.

Jaid se apresuró a aclarar que los adules registran a diario un gran número de contratos de compraventa inmobiliaria. Aunque demuestran rigor al exigir a los clientes un certificado expedido por los servicios de recaudación que acredite el pago de los impuestos y tasas que gravan el bien en el año de la transmisión o cesión, su papel sigue siendo limitado. "Los adules reciben notificaciones de los contables públicos sobre el pago de las deudas con el Tesoro, pero la ausencia de una cuenta profesional dedicada al depósito de los fondos de los clientes impide su plena implicación en este proceso", subraya Jaid. Señala una falta de voluntad del legislador de asumir sus responsabilidades, a pesar de las reclamaciones recurrentes de la Instancia Nacional de Adules, disponibles desde hace más de una década, así como las recomendaciones del Pacto Nacional para la Reforma del Sistema Judicial.

El presidente del Consejo Regional también menciona la generalización de los pagos en efectivo en casi todas las transacciones autenticadas por los adules. Una tendencia que, según él, amenaza directamente la economía nacional y compromete la seguridad contractual. "No es del interés del Estado ver importantes sumas escapar a su recaudación, ni del interés general autorizar la circulación de fondos fuera del circuito económico oficial", observa. "¿En qué medida el notariado adular, a través del procedimiento de ATD, contribuye realmente a la recaudación de los créditos públicos y al equilibrio entre los derechos del Tesoro y las garantías de los contribuyentes ? Y sobre todo, ¿tiene el legislador financiero una voluntad real de abordar el problema estructural de los pagos en efectivo que corroe hoy el mercado contractual ?", se pregunta Jaid, lamentando que "ciertos disfuncionamientos persistan, en particular el vacío jurídico dejado por el artículo 100 del Código de Recaudación de Créditos Públicos, que ha permitido que la evasión fiscal perdure".

Según sus explicaciones, este artículo ha excluido efectivamente a los adules de la entrega de los fondos procedentes de las cesiones, incluso cuando son requeridos por los servicios fiscales, debido a la ausencia de un fundamento legal que les obligue a hacerlo.