Marruecos debate : ¿Revocar la nacionalidad a israelí-marroquíes por la crisis en Gaza ?

"Los llamados israelíes de origen marroquí reconocen su pertenencia a una entidad criminal y sus prácticas contra la humanidad", escribe Malika El-Assimi, intelectual marroquí y miembro de Al-Istiqlal, formación política que forma parte de la actual coalición gubernamental, en una carta dirigida al rey Mohamed VI, instando al soberano a revocar la ciudadanía de los israelíes-marroquíes debido a "su contribución a los crímenes de guerra". Según la responsable, "cada uno de estos elementos podría ser un motivo para retirarles su nacionalidad marroquí, que no permite a su titular cometer actos criminales ni pertenecer a los ejércitos de un país extranjero".

La ex diputada añadirá que Israel es una entidad militar en la que no hay "ningún civil" y que "los llamados civiles son ejércitos de reserva y un componente estructural de una entidad puramente militar". En 2020, los judíos marroquíes y los judíos de ascendencia marroquí representaban aproximadamente 1 millón de la población total de Israel (9,1 millones).

El-Assimi también ha pedido al rey Mohamed VI que rompa todos los vínculos con Israel y anule el acuerdo de normalización firmado en diciembre de 2020. Este llamamiento se suma a los lanzados por los marroquíes comprometidos con la causa palestina después del estallido de la guerra entre Israel y Hamás en octubre. El Istiqlal, el partido al que pertenece El-Assimi, había presentado en 2018 en el Parlamento un proyecto de ley destinado a criminalizar cualquier forma de normalización con Israel. Pero desde los acuerdos de normalización, la mayoría de los partidos políticos marroquíes, incluido el Istiqlal, han evitado pronunciarse abiertamente sobre su posición con respecto a los vínculos con Israel. Marruecos e Israel deberían celebrar el tercer aniversario de su acuerdo de normalización el 22 de diciembre. El mismo día, grupos locales pro-palestinos planean una manifestación nacional en Rabat para reiterar su llamamiento a romper todos los vínculos con Israel y cerrar la oficina de enlace israelí en Rabat, según informa The New Arab.