Cruzada contra la "mafia de las sombrillas" : Consumidores exigen liberar playas marroquíes

La Federación Marroquí para la Protección del Consumidor tiene previsto llevar a cabo iniciativas sostenidas para alertar y llamar a las autoridades locales competentes a intervenir con el fin de liberar el dominio público en las playas. El verano de este año marca "la declaración de guerra contra estas prácticas que agotan a los veraneantes marroquíes", declaró a Hespress el vicepresidente de la Federación Marroquí para la Protección del Consumidor. La federación tiene previsto dirigir correspondencia a Saaïd Amzazi, wali de la región de Souss-Massa y gobernador de la prefectura de Agadir Ida-Outanane.

Según este último, el verano en curso ha visto "la persistencia de los mismos sufrimientos, las prácticas de ocupación del dominio público en las playas continúan a pesar de los llamamientos recurrentes al control y la liberación de estos espacios cada año". "En algunas ciudades, como Tánger, hay informaciones sobre la intervención de las autoridades para liberar el dominio público en las playas ; es un enfoque que debería generalizarse a todas las regiones de Marruecos", señala, añadiendo además que las acciones de la Federación contra estas prácticas se extenderán también a los "guardias de playa". Sus acciones contribuyen a forjar una imagen negativa en el ciudadano marroquí, renueva su llamamiento a las autoridades competentes para que actúen a fin de poner fin a estos fenómenos recurrentes cada verano.

El presidente de la Asociación Marroquí de Defensa de los Derechos de los Consumidores, abunda en el mismo sentido. El verano "se ha caracterizado por la persistencia de las manifestaciones de explotación del dominio público en las playas por parte de los propietarios de sombrillas", ha señalado, añadiendo que esta práctica "es totalmente ilegal y no entra en las prerrogativas de los municipios ; requiere la intervención de los caídes para liberar el dominio público". Según él, la continuación de estas prácticas constituye una carga para los veraneantes marroquíes, de manera recurrente cada año.