Confesión estremecedora : Acusado admite doble filicidio y feminicidio en Mallorca

El juicio de Ali Khouch, un marroquí de 39 años, acusado de haber matado a su esposa embarazada y a su hijo de siete años en Sa Pobla (Mallorca) en mayo de 2021, continuó este lunes 27 de enero ante el tribunal provincial de Baleares. El acusado ha confesado su crimen. Se enfrenta a cadena perpetua.
Procesado por asesinato y homicidio, el acusado se ha defendido ante un jurado popular. A diferencia de su defensa, que había declarado en su escrito provisional que no sabía que su esposa de 28 años, también de origen marroquí, estaba embarazada, Ali Khouch ha confesado lo contrario. "Sabía que mi esposa estaba embarazada", declaró el marroquí de 39 años a través de un intérprete. El acusado está acusado de haber estrangulado hasta la muerte a su esposa y a su hijo menor el 16 de mayo de 2021, según informa La Razón.
Durante las seis sesiones del juicio que comenzó el 17 de enero pasado, testigos, expertos y miembros de la familia de la víctima han afirmado que la mujer estaba embarazada de 21 semanas y que su embarazo era visible. En la audiencia de este lunes, Ali Khouch se deshizo en disculpas : "Pido perdón y disculpas al magistrado y a todos los que están aquí hoy. Por dentro me siento devastado por todo lo que he hecho". Khouch había sido objeto de dos denuncias por violencia de género y de una orden de alejamiento desde 2018.
La defensa del acusado afirma que actuó bajo la influencia del alcohol y la cocaína. "Creo que no hay duda de que el 16 de mayo de 2021, cuando Ali mató a su esposa y a su hijo, lo hizo bajo la influencia de las drogas", argumentó el abogado del marroquí, quien sin embargo criticó el hecho de que este último no se le realizara una prueba de sangre y orina después de su arresto. Un argumento rechazado por el ministerio público, que considera que "ser drogadicto no es un cheque en blanco para cometer delitos".
El fiscal reconoce que el acusado se entregó a la policía nacional al día siguiente del crimen. Pero no colaboró con la justicia, sin dar ningún detalle sobre las circunstancias de su acto. Así, la fiscalía ha solicitado contra él la prisión permanente revisable por el asesinato de su hijo y 25 años de prisión por el de su esposa embarazada. La defensa ha anunciado que pedirá la expulsión del marroquí de España, una vez que haya cumplido parte de su condena. "No se merece vivir en nuestro país". El jurado emitirá su veredicto el miércoles.
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