Alerta fiscal para marroquíes en el extranjero : tu casa prestada en Marruecos podría costar caro

Siempre que el bien no esté alquilado ni ocupado por un pariente directo (hijo o ascendiente), se considera que el propietario ha percibido un ingreso inmobiliario imponible.

Una noción de ingresos... incluso sin alquiler

Contrariamente a lo que se podría creer, el impuesto inmobiliario no se aplica únicamente a los alquileres efectivamente cobrados. El fisco marroquí considera que el simple hecho de dejar que alguien ocupe un bien inmobiliario, incluso de forma gratuita, constituye una ventaja en especie y, por lo tanto, un ingreso a declarar.

Así, si un marroquí residente en el extranjero pone a disposición de forma gratuita una vivienda en Marruecos a una persona que no sea sus hijos o sus padres, deberá declararla como un ingreso inmobiliario, al igual que un alquiler convencional.

Una deducción del 40%, pero una obligación de declaración

La guía prevé una deducción fija del 40% sobre los ingresos inmobiliarios antes del cálculo del impuesto. Lo que significa que solo el 60% del valor locativo estimado del bien estará sujeto a impuestos. Pero esto no exime en absoluto de la obligación de declaración.

Ejemplo : una villa dejada gratuitamente a un primo, valorada en 50.000 dirhams anuales en valor locativo, genera una base imponible de 30.000 dirhams después de la deducción. Esta cantidad se incluye luego en la escala progresiva del impuesto sobre la renta.

Los casos exentos : solo hijos y padres

Sin embargo, hay dos casos de exención claramente definidos por la administración fiscal :
• Si el bien se pone gratuitamente a disposición de los hijos del propietario,
• O de sus ascendientes (padres).

En estos casos concretos, no se adeuda ningún impuesto y la vivienda no se considera generadora de ingresos. Para todos los demás casos (hermanos, hermanas, primos, amigos, etc.), se aplica plenamente el impuesto.

Declarar los ingresos inmobiliarios : una obligación anual

Todo marroquí residente en el extranjero que sea propietario de un bien en Marruecos está obligado a declarar sus ingresos inmobiliarios cada año, incluso si no percibe ningún alquiler. Esta declaración se realiza por vía electrónica, a través del portal de la Dirección General de Impuestos (DGI), antes del 1 de marzo del año siguiente al de la ocupación.

El pago del impuesto se exige según las tasas progresivas aplicables al conjunto de los ingresos del hogar. Solo la opción por la tasa liberatoria del 20%, en ciertos casos de alquiler a profesionales o personas jurídicas, puede eximir de la declaración.

Una vigilancia indispensable para evitar sorpresas desagradables

Los controles fiscales que se centran en los bienes no declarados o en las puestas a disposición gratuitas son cada vez más frecuentes. En caso de no declaración, el propietario se expone a rectificaciones y recargos por retraso.

Para evitar cualquier sorpresa desagradable, es esencial que los marroquíes residentes en el extranjero :

• Identifiquen correctamente al ocupante de la vivienda,
• Comprueben si entra en los casos de exención,
• Declaren sus ingresos inmobiliarios estimados tan pronto como sea necesario.

Lo que hay que recordar

Poner gratuitamente una vivienda a disposición de un allegado no significa que ese bien sea invisible para el fisco. Fuera de los casos estrictamente definidos por la ley, esta ocupación gratuita se asimila a un alquiler implícito y está sujeta a impuestos.

Es mejor anticipar la declaración que tener que justificar, a posteriori, una exención inexistente.