El tomate marroquí desata polémica en Francia : ¿Proteccionismo o competencia justa ?

La guerra contra el tomate marroquí se intensifica en Francia. Muestra de ello es el artículo de BFMTV titulado "Un 40% más de importaciones en 5 años : los tomates marroquíes en el punto de mira de los productores franceses". "Desde hace meses, el tomate y, más precisamente, el procedente de Marruecos, está en el punto de mira de los productores franceses. En junio ya se organizaron operaciones relámpago en algunos establecimientos de gran distribución. En Arlés, en Bocas del Ródano, por ejemplo, los productores locales irrumpieron en un E. Leclerc para pegar etiquetas "Origen Marruecos" en bandejas de tomates cherry que se vendían a 95 céntimos", escribe el autor del artículo, subrayando que "el atractivo de la distribución" por el tomate marroquí "obviamente no se remonta al repunte inflacionista post-Covid".

Precisará : "Relativamente estables entre 2011 y 2017 en torno a las 300.000 toneladas anuales, las importaciones de tomates marroquíes han experimentado un salto desde entonces, según las cifras de Aduanas. Alcanzaron más de 425.000 toneladas en 2022, es decir, un aumento del 40% en apenas cinco años". Marruecos se ha convertido en el tercer exportador de tomates del mundo. El país galo es con mucho su principal cliente, con el 51% de la producción exportada al extranjero. Le siguen el Reino Unido (19%) y los Países Bajos (11%). Una dura competencia para el tomate español, que retrocede desde hace 10 años, pero sobre todo para el tomate francés.

Consecuencia : el país de Emmanuel Macron es el tercer importador mundial de tomates, detrás de Estados Unidos y Alemania. "En total, se estima que el 36% de los volúmenes anuales de tomates frescos consumidos en Francia se importan, principalmente en invierno, pero cada vez más a lo largo de todo el año debido al desarrollo de una oferta marroquí, belga y neerlandesa que compite con la producción francesa de temporada", alertaban en 2022 los autores de un informe del Senado.

La recolección de tomates requiere una gran movilización de mano de obra. El salario horario con cargas de un obrero en Marruecos es de 0,74 euros, frente a los 13,64 euros en Francia, recuerda Légume de France. En las tiendas, "en algunos productos como el tomate cherry, la diferencia se traduce en diferencias de precio espectaculares", se informa. "El precio medio en tienda del tomate cherry de origen francés es 2,4 veces más alto que el origen Marruecos, estima el sitio web de las cámaras agrarias bretonas. Para los tomates cocktail y redondos, la diferencia es menos importante (1,4). Esto es aún más significativo si se tiene en cuenta que la cuota de mercado del tomate cherry en las compras de los hogares franceses ha pasado del 7,8% en 2015 al 14,3% en 2020".