Royal Air Maroc estrena vuelo directo Casablanca-Toronto : Oportunidades y desafíos para la comunidad marroquí

La apertura de esta línea se enmarca en una estrategia de desarrollo más amplia. Royal Air Maroc tiene como objetivo consolidar su presencia en América del Norte, como confirmó Nour-eddine Ez-zairi, representante regional de la compañía en Canadá, quien expresó la voluntad de la compañía de ampliar su red y reforzar su posicionamiento comercial en América del Norte.

Más allá del simple aumento del tráfico de pasajeros, este enlace tiene un fuerte significado simbólico. Refuerza los lazos entre Marruecos y Canadá, favoreciendo los intercambios en ámbitos tan diversos como la economía, la ciencia o la cultura. Según el responsable, esta nueva línea permitirá a la compañía nacional consolidar su liderazgo regional en África y desempeñar un papel central en la conexión entre África y el resto del mundo.

El anuncio de este vuelo directo ha sido recibido con entusiasmo por la comunidad marroquí de Toronto. Narjis Lazrak, presidenta de la Asociación Marroquí de Toronto, lo considera un evento importante para la comunidad marroquí en Toronto y para las relaciones bilaterales, precisando que la contribución de los marroquíes de Toronto al desarrollo de la ciudad pone de manifiesto su capacidad de adaptación y su contribución activa a la dinámica socioeconómica.

Operada por aviones Boeing 787 Dreamliner, la ruta Casablanca-Toronto ofrece tres vuelos semanales : los miércoles, viernes y domingos. Viene a complementar el dispositivo de Royal Air Maroc en América del Norte, que ya incluye vuelos a Nueva York, Washington, Miami y São Paulo.

Pero después de los elogios llegan las críticas. Muchos marroquíes residentes en América del Norte habían criticado enérgicamente en el pasado la política de precios de la aerolínea, especialmente durante las vacaciones de verano, cuando era prácticamente imposible que los marroquíes residentes en el extranjero volvieran a Marruecos debido al alto costo de los billetes. Ahora le corresponde a la compañía encontrar un justo equilibrio entre las expectativas de los marroquíes de Canadá y sus imperativos económicos.

Una simulación rápida del precio de un billete de ida entre Toronto y Casablanca para el próximo mes de julio arroja un precio de poco más de 900 dólares canadienses. Estos deberían aumentar sustancialmente de aquí al verano.