Marruecos endurece la fiscalidad : Nuevas reglas para propietarios expatriados con inmuebles en alquiler

Said
Marruecos endurece la fiscalidad : Nuevas reglas para propietarios expatriados con inmuebles en alquiler

Los marroquíes residentes en el extranjero (MRE) que perciben ingresos por arrendamiento de bienes inmuebles ubicados en Marruecos están sujetos al impuesto sobre la renta. Un elemento central de este régimen fiscal, la retención en la fuente sobre los alquileres, debe ser dominado correctamente por los arrendadores para asegurar su cumplimiento.

Este dispositivo implica que el inquilino, cuando se trata de una persona jurídica o una empresa responsable, deduzca una parte del alquiler para transferirla directamente a la administración tributaria. El ámbito de aplicación de esta retención no es universal y depende del estatus del arrendatario. El objetivo del Estado es garantizar la percepción del impuesto, especialmente de los contribuyentes no residentes.

Para el propietario, esta deducción constituye un crédito fiscal. Como se estipula en la Guía Fiscal, el monto retenido es "imputable" al impuesto sobre la renta total adeudado por el año de percepción de los alquileres. Esta imputación evita una doble imposición al arrendador y funciona como un pago anticipado. Por lo tanto, se recomienda obtener del inquilino un justificante que acredite el monto pagado al Tesoro Público, ya que este documento es una prueba en caso de verificación.

Sin embargo, es esencial tener en cuenta que este mecanismo de retención no exime al propietario de su obligación declarativa. La presentación de una declaración anual de ingresos por arrendamiento sigue siendo obligatoria, incluso si no hay saldo de impuestos que pagar después de la imputación de la retención. Esta declaración debe presentarse por vía electrónica antes del 1 de marzo del año N+1.

El cálculo del impuesto adeudado se rige por una escala proporcional. La tasa es del 10% para una base imponible bruta anual inferior o igual a 120.000 dirhams, y del 15% por encima de este monto. Existe una exención sobre el tramo de ingresos de hasta 30.000 dirhams, pero esta no es acumulable con otras exenciones de la misma naturaleza. La correcta aplicación de estas reglas es necesaria para una declaración precisa.