Francia endurece leyes migratorias : Regularización de indocumentados en riesgo

Sylvanus
Francia endurece leyes migratorias : Regularización de indocumentados en riesgo

El gobierno francés quiere menos regularizaciones de indocumentados. Se ha adoptado un texto en este sentido para endurecer las condiciones.

Ya no será posible que las prefecturas regularicen a más de 30.000 indocumentados por año. El ministro del Interior, Bruno Retailleau, ha adoptado un texto que endurece las regularizaciones y tiene como objetivo reducir en aproximadamente un tercio el flujo de regularizaciones, es decir, 20.000. En una circular a los prefectos, ha aumentado de cinco a "al menos siete años" el tiempo de presencia requerido en el territorio francés para que un extranjero solicite papeles por admisión excepcional a la residencia. "Una duración de presencia de al menos 7 años constituye uno de los indicios de integración pertinentes", escribe el ministro. "La admisión excepcional a la residencia de un extranjero en situación irregular solo puede producirse en ausencia de amenaza al orden público", precisa Retailleau, instando a los prefectos "a acompañar sistemáticamente el rechazo de residencia con una medida que implique la obligación de abandonar el territorio francés".

Otro cambio importante : "con el fin de garantizar una integración efectiva, se deberá prestar especial atención al dominio del idioma francés por parte de los solicitantes. En este sentido, la justificación de un diploma francés o de una certificación lingüística, expedida por un organismo debidamente acreditado, o cualquier otra prueba de dominio del idioma deberá ser valorada positivamente", se lee en la circular. La regularización también requiere un compromiso por parte del extranjero, que no puede ser polígamo. Él "se compromete, por contrato, a respetar los principios de la República", explica Le Figaro. En cuanto a los trabajadores extranjeros, se publicará una lista de profesiones con escasez de mano de obra en Francia en febrero, para enmarcar la admisión excepcional a la residencia de profesionales ya insertados a través del trabajo en hospitales, residencias de ancianos, restauración, construcción, agricultura o calderería, informa la misma fuente.