Falsa alarma en Ferrol : Joven se retracta de denuncia por violación colectiva contra marroquíes

Asistida por un abogado, la joven declaró el sábado a la policía que nunca fue violada, informa Europa Press. Cambió su versión mientras la investigación sobre la violación colectiva de la que había dicho ser víctima, está en curso. El presunto autor de la agresión sexual, un hombre de origen marroquí, ha sido detenido. Al acusado se le ha emitido una orden de expulsión que no se ha ejecutado. Otros tres jóvenes, sus cómplices, están siendo activamente buscados.

En su denuncia inicial, la joven afirmaba haber sido violada el miércoles por la mañana en la Plaza de España, cuando se dirigía a su domicilio, en la calle Galiano. Explicó que había encontrado en el camino a cuatro jóvenes de origen marroquí. Según su relato, uno de ellos se le acercó primero para entablar conversación y ganar su confianza. Luego, los otros tres la habrían rodeado y arrastrado hasta la entrada del aparcamiento, amenazándola con un cuchillo y golpeándola hasta que perdió el conocimiento, antes de violarla.

El caso ha suscitado la indignación de los vecinos del barrio, que denuncian la creciente inseguridad en la ciudad. "No se puede imaginar que algo así ocurra a plena luz del día", comenta un residente. "Ferrol era una ciudad tranquila ; hoy, tenemos miedo por nuestras hijas", declara una madre que vive cerca del lugar de la agresión. Este incidente también reaviva el debate sobre la eficacia de los mecanismos jurídicos de ejecución de las expulsiones. En este caso, el detenido ha seguido residiendo en Galicia, a pesar de una orden firme de expulsión.

"La eficacia del sistema depende de los recursos policiales y judiciales disponibles para identificar y detener a las personas a las que se les prohíbe permanecer en España", explican expertos consultados por Periodista Digital. Según fuentes, el sospechoso había sido identificado unas semanas antes por robos menores, pero nunca había sido detenido. Por su parte, las asociaciones de defensa de los derechos humanos piden no criminalizar a toda la comunidad migrante por actos individuales. Llaman a una mayor eficacia policial y judicial para proteger a las posibles víctimas.