Escándalo en centro de acogida : Menores migrantes denuncian maltrato y racismo en Montigny-le-Bretonneux

Sylvanus
Escándalo en centro de acogida : Menores migrantes denuncian maltrato y racismo en Montigny-le-Bretonneux

Menores no acompañados - marroquíes y egipcios - han presentado dos denuncias contra un establecimiento de Montigny-le-Bretonneux al que acusan de maltrato y discriminación racial.

El 14 de abril, menores no acompañados presentaron una denuncia por discriminación racial y maltrato contra el hogar Savea 78-Espoir que los acogió y contra la jefa de servicio. Tres días después, enviaron una carta al fiscal de la República. El 7 de abril, habían enviado una correspondencia firmada por 22 jóvenes no acompañados, equivalente a una llamada al juez de menores. Desde entonces, se ha abierto una investigación por "malos tratos y discriminación. Se debería escuchar a algunas personas próximamente", indica la fiscalía de Versalles.

En esta carta, relatan lo que han vivido en el hogar 78-Espoir. "Desde que nos hicieron cargo, sufrimos actos de maltrato que ponen en peligro nuestro bienestar físico y psicológico, indica la carta. [...] Hemos intentado denunciar estos abusos, pero no se ha tomado ninguna acción concreta para protegernos, por lo que nos dirigimos a usted con la esperanza de obtener justicia y protección". Afirman que tres de ellos fueron echados a la calle, de un día para otro, el 24 de febrero, "sin justificación, ni documento oficial", y eso, en pleno período de tregua invernal.

"Fuimos expulsados de la estructura, sin alojamiento, sin dinero y sin posibilidad de defendernos. Nuestros efectos personales, incluidos documentos administrativos importantes como un pasaporte, fueron tirados a la basura", confían dos de ellos. "Hemos dormido en un local de basura, luego en la estación de Trappes. Pudimos comer gracias a las comidas servidas por la mezquita de Trappes durante el ramadán", escriben estos adolescentes.

Acusan a la jefa de servicio llegada en 2023 a esta asociación, que "goza de buena reputación", de "maltrato a largo plazo". "Desde que asumió el cargo, hemos sufrido humillaciones repetidas, insultos, comentarios racistas y difamatorios, amenazas de denuncia a la prefectura con el objetivo de bloquearnos en nuestros trámites de regularización, así como la supresión injustificada de nuestras indemnizaciones y ayudas vitales", aseguran estos jóvenes. Pudieron contar con el apoyo de la comunidad educativa del liceo Vaucanson, en Les Mureaux, donde están escolarizados, y de la asociación les blouses blanches pour les libertés fondamentales, que encontraron soluciones de realojamiento.

Su vida cotidiana está marcada por insultos. "Vuelve a tu país, come piedras. Ella nos dice que vayamos a vender cigarrillos a Barbès como nuestros hermanos, registra nuestros calzoncillos. La señora nunca nos habla normalmente. Nos tratan como a perros...", enumeran los dos jóvenes que han presentado la denuncia. Uno es egipcio, el otro marroquí. Actualmente, se preparan para un CAP de restauración. "Nos ha confiscado los ordenadores que nos entregó la región para nuestros cursos. Y no tenemos wifi en el hogar, ni televisión", prosiguen.

Después de tomar conocimiento de las denuncias, la dirección del hogar puso fin al contrato de la jefa de servicio. "Hemos iniciado una investigación interna, explica el director. La jefa de servicio ha sido suspendida. Creo que su regreso no está previsto, ni es viable. No puedo concebir mantener a una persona que haya tenido comentarios inadecuados hacia los niños". Sin embargo, va a matizar las acusaciones de estos jóvenes. "A menudo observamos que tienen dificultades para gestionar su dinero. Cuando reciben sus indemnizaciones, tienden a comprarse zapatillas u otras cosas y los frigoríficos quedan vacíos. Por lo tanto, hemos decidido hacer una caja común. Algunos jóvenes no estaban de acuerdo, porque envían el dinero a sus familias".

En cuanto a la expulsión del hogar de los tres jóvenes, la dirección explica : "Dos de estos tres jóvenes habían introducido a una joven en su apartamento, lo cual está prohibido. Esto fue constatado por varias personas". En cuanto al tercero, indica : "Es un joven con una obligación de abandonar el territorio francés (OQTF). A partir de ahí, no estamos obligados a mantenerlo, sobre todo porque es mayor de edad como los otros dos".