Divorcio virtual : Pareja marroquí-israelí se separa por Zoom en un caso sin precedentes

Todo comenzó con un conflicto entre los dos enamorados. El marido vive en Marruecos y la mujer en Israel. El esposo dejó de apoyar financieramente a su cónyuge, quien se quedó en Israel para vivir en el apartamento común. La mujer decide romper los votos con el marroquí. Entonces inicia una acción legal ante el tribunal de familia y también ante el tribunal rabínico para solicitar el divorcio. Su marido se niega a otorgarle el divorcio con el argumento de que ella vive en Israel. El caso se transferirá a la división Aguna de la administración de los tribunales rabínicos. Esta ha llevado a cabo una larga serie de actividades con el marido, en parte a través del tribunal rabínico en Marruecos.

Pero estos pasos resultaron infructuosos. Después de varias semanas, llega a Israel el padre del marido. El tribunal aprovecha la oportunidad y emite una orden que le prohíbe salir del territorio israelí. Luego lo convoca a audiencias para intentar determinar si desempeñaba un papel en la negativa al divorcio. Después de cuatro audiencias, el padre del marido será liberado y regresará a Marruecos. El tribunal acababa de darse cuenta de que no tenía nada que ver con la negativa de su hijo a divorciarse. Después de este episodio, se emprendió una mediación entre los dos cónyuges la semana pasada. Si bien el marido y su esposa lograron llegar a un acuerdo, el tribunal en Marruecos no estaba en condiciones de decretar el divorcio. Se teme entonces volver a la casilla de salida.

Entra en escena la división Aguna. El caso se encomendará entonces al juez rabínico, miembro del tribunal rabínico de Tel Aviv. Este prepara el divorcio por medios electrónicos. La esposa llega al tribunal rabínico de Tel Aviv. Se presenta ante su marido, que aún está en Marruecos, a través de Zoom. Así se decretará el divorcio.