Desmantelan red de espionaje en aeropuerto de París : Tres detenidos por vigilar a policías

Todo comenzó con una información anónima recogida en julio, según la cual un tal Anass E., un proxeneta reincidente de origen marroquí que opera en Roissy desde 2017, "habría comenzado a espiar diariamente a los Boers, los funcionarios de policía de la unidad de control del transporte de personas, a partir de marzo de 2022". Este vigilante, de 32 años de edad en la actualidad, escrutaba los movimientos de los Boers todos los días, entre las 7:30 y las 16:00 horas. Sus cómplices Aurelian Z., un indigente rumano de 45 años, y Aboubaker G., de 21 años, se apostaban permanentemente frente a las oficinas de los Boers para vigilar sus hechos y gestos, sus desplazamientos. Incluso a veces enviaban fotos de los policías que vigilaban y de las matrículas de sus vehículos policiales camuflados, así como de sus vehículos personales. Estos vigilantes llegaban incluso a realizar verdaderas vigilancias en el aeropuerto. "Los policías eran vigilados, amenazados y a veces seguidos hasta sus casas. A algunos se les pincharon los neumáticos del coche", precisa una fuente cercana al caso.

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Estos vigilantes comunicaban esta información a los conductores de taxis clandestinos a través de cuatro grupos de Whatsapp o Telegram a cambio de entre 100 y 140 euros por semana : "Cuanto más tardío era el pago, más cara era la cuota". Cada grupo de discusión contaba con entre 20 y 50 clientes. Se estima que los ingresos de la red ascendieron entre 170.000 y 300.000 euros desde marzo de 2022. Esta información permitía a los conductores de taxis clandestinos estafar a los turistas haciéndoles pagar más caro el trayecto. Entre las víctimas, una familia surcoreana que pagó 950 euros por un trayecto Roissy-París, informa Le Parisien.

Estos tres hombres serán detenidos en Moissy-Cramayel (Seine-et-Marne), Roissy-en-France (Val-d’Oise) y Aubervilliers (Seine-Saint-Denis) por los Boers, y puestos bajo control judicial el viernes 15 de diciembre por "ejecución de un trabajo oculto en banda organizada" y "complicidad en la recogida de un cliente en una vía abierta a la circulación pública, sin justificación de reserva previa por parte del conductor de un vehículo de transporte por carretera de personas con fines lucrativos", informa la fiscalía de Bobigny, precisando que los hechos que se les imputan se cometieron entre el 31 de marzo de 2022 y el 12 de diciembre de 2023. Según la fiscalía, a los tres sospechosos se les ha prohibido acudir a los aeropuertos de Roissy-Charles-de-Gaulle, Orly y Le Bourget, así como entrar en contacto entre sí, hasta que sean juzgados en marzo de 2024.

París está decidida a librar una lucha implacable contra esta plaga antes de la celebración de los Juegos Olímpicos previstos del 26 de julio al 11 de agosto en su territorio. "La Prefectura de Policía de París está decidida a poner fin a estas redes estructuradas", subraya el comisario Jean-Sébastien Rosadoni, jefe de la división regional de seguridad vial. Bajo la égida de la delegación de la Prefectura de Policía para la seguridad y la protección de las plataformas aeroportuarias, todos los servicios del Estado están comprometidos en esta acción virtuosa que estamos llevando a cabo.