Crisis turística en el norte de Marruecos : Precios desorbitados ahuyentan a veraneantes

Souad, una mujer de cuarenta años originaria de Khénifra entrevistada por Tanja24, había planeado pasar parte de sus vacaciones de verano en Martil acompañada de sus hijos. Pero tuvo que cancelar este viaje porque "los precios ofrecidos han superado los límites de lo razonable". "El precio de una noche en una casa muy modesta en términos de calidad no cuesta menos de 1.000 dirhams. Es un escándalo", denunció.

Debido al aumento de los precios de los servicios de alojamiento y restaurantes en esta ciudad, Souad prefiere disfrutar de sus vacaciones en otra ciudad donde, espera, los precios serán más asequibles. Las autoridades locales de la prefectura de M’diq-Fnideq y en particular las de Martil habían anunciado medidas para regular el sector del alquiler turístico con el fin de "valorizar los servicios ofrecidos a los visitantes, contribuyendo al desarrollo turístico local".

Lamentablemente, no se ha llevado a cabo ninguna acción concreta en este sentido, lamentan los turistas y veraneantes que visitan la ciudad y la región. En ciudades como M’diq, Asilah y Al Hoceima, jóvenes hombres ofrecen a estos últimos durante la temporada de verano apartamentos y casas en alquiler a precios que oscilan entre 500 y 1.000 dirhams o más. Pero la calidad de los servicios en estos alojamientos a menudo deja mucho que desear.

El Ministerio de Turismo debe reforzar los controles y tomar medidas para garantizar una mejor oferta de servicios turísticos, en términos de calidad, precio y capacidad de acogida, a las familias marroquíes y a los marroquíes residentes en el extranjero durante la temporada de verano, exhortó a su vez el diputado del PPS, Rachid Hamomuni, denunciando los "aumentos exorbitantes, irrazonables y a veces ilógicos en los servicios turísticos internos".