Crisis de movilidad : Temara-Rabat, un trayecto diario que se convierte en pesadilla

Sylvanus
Crisis de movilidad : Temara-Rabat, un trayecto diario que se convierte en pesadilla

Numerosos funcionarios, empleados y estudiantes u otras categorías se encuentran atrapados cada día en las diferentes estaciones de taxis de la ciudad de Temara, dedicadas al transporte de los ciudadanos hacia la capital Rabat.

Largas filas de espera, altercados verbales, peleas entre conductores de taxis de gran tamaño... Los habitantes de Temara se ven obligados a esperar por cientos durante un largo período de tiempo, que varía entre 30 y 40 minutos en las diferentes estaciones de taxis de la ciudad de Temara, dedicadas al transporte hacia la capital Rabat, informa Achkayen. Una situación perjudicial para muchas personas que se enfrentan a problemas laborales con sus superiores debido a sus retrasos repetidos en su lugar de trabajo.

En el origen de este problema recurrente, un importante desacuerdo surgido a principios de enero pasado entre los taxistas de las dos ciudades vecinas. Se prohibió a los taxistas de Temara recoger pasajeros en la estación "Al-Manal" de Rabat para llevarlos de vuelta a Temara. La reacción de los taxistas de la ciudad vecina no se hizo esperar. Tomaron una medida similar, impidiendo a sus homólogos de la capital transportar pasajeros hacia Rabat desde Temara. Desde entonces, cada parte aplica estrictamente la normativa relativa a la obligación de volver vacíos.

La normativa del sector prohíbe a los taxistas transportar pasajeros de otra ciudad. Pero una práctica habitual vigente desde hace años entre Rabat y Temara permitía esta excepción bajo el principio de "reciprocidad". Un acuerdo permitía a los taxistas de Temara recoger pasajeros en ciertos barrios de la capital, a cambio del derecho concedido a los taxistas de Rabat de transportar viajeros desde la estación "Milano" en Temara hacia Rabat. Un compromiso que recibió el asentimiento de las autoridades, porque aseguraba una fluidez constante entre las dos ciudades.

Informados de la situación, los servicios de policía y las autoridades locales y provinciales aún no han podido encontrar una solución.