Ziyech, nuevo ídolo del mundo árabe : su gesto por Palestina eclipsa a Salah

Los blogueros y YouTubers de varios países árabes repiten a una sola voz : el jugador marroquí Hakim Ziyech ha vuelto a conquistar el corazón de los aficionados árabes de una manera brillante, arrebatando así el título de ’Orgullo de los Árabes’ a otros jugadores, como Mohamed Salah, Riyad Mahrez, Mohamed Abou Trika y otros, comenta el escritor y periodista Tahar Taouil. En el origen de esta muestra de simpatía y afecto, un gesto sencillo por parte de la ex estrella del Ajax a favor de la causa palestina. "La razón de todos estos elogios bien merecidos para el jugador marroquí Ziyech es que enarboló la bandera palestina durante la celebración de su equipo Galatasaray por el título de la liga turca", explica el periodista en un artículo publicado en el periódico Al Qods Al Arabi, informando de que el internacional marroquí saltó al campo envuelto en la bandera palestina entre los aplausos de los aficionados.

Para Tahar Taouil, el León del Atlas "ha dado un ejemplo vivo de la fe en la justa causa palestina y de su apoyo a los oprimidos agotados por la maquinaria de guerra israelí". Mahmoud Abbas también aprecia el gesto de Ziyech. El presidente palestino Mahmoud Abbas Abu Mazen "se emocionó con la escena en la que Ziyech enarboló la bandera palestina, al igual que se conmovió por la simpatía de los pueblos europeos y de los estudiantes estadounidenses por los sufrimientos de los habitantes de Gaza, y por su denuncia de la guerra de exterminio librada por el enemigo sionista", señala Taouil.

En la red, los internautas no han dejado de elogiar al pueblo marroquí, defensor ardiente de la causa palestina. "Marruecos es uno de los países del mundo donde aún se celebran manifestaciones semanales en varias ciudades, y donde el pueblo sigue mostrando una gran conciencia de la causa palestina, a pesar de los errores políticos", han testimoniado. Según el periodista, estas manifestaciones tienen lugar "en un momento en que muchos regímenes árabes que se jactan de ser nacionalistas y árabes prohíben a sus ciudadanos el derecho a salir a las calles para expresar pacíficamente su solidaridad con los palestinos". Y concluye : "es cierto que la normalización a nivel oficial en Marruecos es un paso erróneo que hay que anular, porque es inconcebible que un marroquí estreche la mano de un sionista cuyas manos están manchadas de la sangre de los inocentes. [...] Este paso es rechazado por la población y por la mayoría de los sindicatos y asociaciones. Y quien sigue las manifestaciones casi diarias en diferentes ciudades marroquíes se da cuenta de que lo que las une es la demanda de poner fin a esta nefasta normalización".