Presión y dudas acechan a Marruecos : ¿Podrá Regragui conquistar la CAN 2025 ?

A pesar del récord de 12 victorias consecutivas (invictos desde hace 14 partidos), Walid Regragui recibe críticas de los aficionados y observadores deportivos. Le reprochan al entrenador algunas decisiones, la ausencia de un estilo de juego claro, el ritmo lento y la dificultad para crear ocasiones de gol, a pesar de la presencia de una generación dorada de estrellas y jóvenes talentos prometedores. No están nada convencidos de la capacidad de los Leones del Atlas de ofrecer a Marruecos su segundo título continental después del de 1976. La próxima edición de la CAN se celebrará del 21 de diciembre al 18 de enero en Marruecos.

"Si nos basamos en los últimos partidos (contra Túnez 2-0, Benín 1-0 a favor de los Leones del Atlas) hay carencias evidentes. Este nivel es preocupante", comenta el exinternacional Fakhreddine Rajhi. Añadirá : "No hemos progresado desde el Mundial de Catar, cuando deberíamos haber dado vuelta a esa página", en referencia a la notable evolución de las selecciones española y portuguesa desde entonces. Sin embargo, matizó sus palabras : "A pesar de todo, aún no está todo decidido. Todo dependerá de cómo abordemos la competición y del nivel de nuestros rivales".

Según el periodista deportivo Hamza Hachlaf, los temores actuales están relacionados con "el choque de Costa de Marfil". Marruecos había sido eliminado en octavos de final de la última CAN cuando la Federación Real Marroquí de Fútbol (FRMF) esperaba que los Leones del Atlas alcanzaran al menos las semifinales. "Vivíamos un momento eufórico después del Mundial, y luego vino una eliminación caricaturesca que trastocó las expectativas", agrega Hachlaf. Regragui había sido criticado después de esta eliminación temprana por sus decisiones, en particular la convocatoria de jugadores lesionados o no preparados, y su apego a un estilo de juego ineficaz contra equipos replegados en defensa.

A pesar de este mal desempeño, el seleccionador de los Leones del Atlas ha conservado su puesto y se le ha renovado la confianza, pero las esperanzas de un cambio de método no se han materializado, estima Hachlaf, quien agrega que "la selección alterna entre buenos partidos y otros débiles, lo que siembra la duda".