Moncef Marzouki desmiente rumores : "No estoy vetado en Marruecos

Sylvanus
Moncef Marzouki desmiente rumores : "No estoy vetado en Marruecos

¿Moncef Marzouki prohibido de entrar a Marruecos ? El ex presidente tunecino y ardiente defensor de un Magreb árabe unido ha puesto fin al rumor.

La información se difundió en las redes sociales. Se decía que Moncef Marzouki tenía prohibido entrar al territorio marroquí. Si bien la información circuló rápidamente en los últimos días, el ex presidente tunecino se apresuró a desmentirla a través de una publicación en su cuenta oficial de Facebook. "Para aclarar definitivamente este asunto, he informado a las autoridades marroquíes, según el protocolo, de mi deseo de realizar una visita familiar, siendo de conocimiento público que mi padre vivió en Marruecos más de treinta años como refugiado político, que se casó allí y que tiene dos hijas y un hijo que viven allí con sus hijos y nietos. Es decir, mi familia marroquí, de la que me siento orgulloso", escribe.

En respuesta, las autoridades marroquíes le informaron, según sus escritos, que su solicitud era admisible, pero que debía cumplir con una obligación : abstenerse de hacer cualquier declaración sobre la política interior y exterior de Marruecos. Moncef Marzouki asegura que aceptaría espontáneamente, incluyendo abstenerse de todo contacto con actores políticos y de derechos humanos. "Excepto que es imposible ya que, durante más de un cuarto de siglo, he mantenido contactos con actores marroquíes en estos sectores", asegura el ex jefe de Estado tunecino, agregando que finalmente ha pospuesto su visita al reino para una fecha posterior. "Sobre la base de estos elementos, reitero que nunca se trató de una prohibición de entrada, sino de condiciones que cambiaban de manera acelerada", precisa.

Moncef Marzouki también abordó el conflicto entre Israel y Hamás. Dice saludar "la valiente posición adoptada por Marruecos, su rey y su pueblo, en apoyo al pueblo palestino en general y al nuestro en Gaza". Además, renovó la expresión de su estima "a Marruecos y a los marroquíes, a Argelia y a los argelinos, a Libia y a los libios, a Mauritania y a los mauritanos y, por supuesto, a mi familia y a la querida Túnez". Sin dejar de renovar su deseo de ver a los pueblos del Magreb árabe superar sus diferencias para preservar los intereses y el futuro de las generaciones futuras de la región.