Éxodo Forzado : Inmigrantes Marroquíes en Canadá Enfrentan Despidos Masivos

En Canadá, los empleados marroquíes con un permiso de trabajo cerrado se ven obligados a regresar a Marruecos debido a la decisión de una multinacional francesa de proceder a despidos masivos a finales de octubre.
La multinacional francesa Newrest ha decidido despedir a 544 empleados de sus instalaciones cerca del aeropuerto de Dorval a finales de octubre. Unos cien inmigrantes temporales, incluidos marroquíes, se verán afectados por esta ola de despidos. Podrían perder su estatus y verse obligados a regresar a su país. Según la CSN, que representa a los empleados de Newrest, el origen de estos despidos masivos es la decisión de Air Canada de romper sus vínculos comerciales con la multinacional para dirigirse a GateGroup, una empresa suiza (anteriormente Gate Gourmet), informa Le Devoir.
Serge Monette, presidente de la Federación de Comercio de la CSN, se molesta al constatar que la empresa Newrest abandona a los trabajadores migrantes a su suerte. "¿Cuál es el plan ? No se puede pedir a esta gente que se desarraiguen durante un año, dos años, y luego perder su trabajo. No tiene sentido lo que se les pide a estos trabajadores", se indigna ante Le Devoir. La situación de un marroquí de origen le afecta particularmente. "Había dejado un trabajo que tenía desde hacía 19 años en Marruecos. Nunca podrá recuperarlo", se lamenta. El empleado marroquí acababa de lograr traer a su esposa y a sus hijos.
El deseo de Monette es que se ofrezca a estos trabajadores temporales la posibilidad de prolongar su estatus y ser reubicados en otro lugar de Quebec. "Queremos ver si hay posibilidad de hacer excepciones y transformar sus permisos cerrados en permisos abiertos", dice. Dado que varios de ellos ya están establecidos aquí, podrían trabajar en sectores con escasez de mano de obra. Varios trabajadores despedidos podrán ser recontratados por GateGroup, pero no es el caso de los trabajadores temporales con un permiso cerrado, precisa sin embargo Monette. "No queremos más permisos cerrados. Abre la puerta a todo tipo de abusos", lamenta. "Y no le oculto que Newrest no es de primera clase".