Caos digital : La pesadilla burocrática que frena la integración de extranjeros en Francia

Sylvanus
Caos digital : La pesadilla burocrática que frena la integración de extranjeros en Francia

A pesar de la desmaterialización de los permisos de residencia en Francia, los extranjeros - solicitantes de permisos de residencia - siguen enfrentando enormes dificultades, en particular problemas informáticos en la plataforma digital de solicitudes que depende de la administración digital para extranjeros en Francia (Anef). Diez asociaciones de ayuda a extranjeros que viven y trabajan en Francia denuncian "disfunciones kafkianas de la plataforma".

Estas disfunciones, señaladas repetidamente a las autoridades, "obstaculizan el acceso de las personas extranjeras al mercado laboral, agravan su precariedad y penalizan gravemente a las asociaciones y empresas que los acompañan o los emplean", lamentan estas asociaciones en un artículo publicado el jueves. Señalan que "esta plataforma de servicio público, obligatoria desde 2021 para el 83% de los permisos de residencia, se suponía que simplificaría todas las solicitudes de permisos de residencia (primera emisión o renovación), pero "sus disfunciones masivas y recurrentes la han convertido en una herramienta para generar precariedad". Estas asociaciones afirman que han estado señalando los errores de la plataforma durante tres años, que tienen como consecuencia privar a las personas extranjeras de la garantía de una vida privada, familiar y profesional.

Pero las disfunciones persisten y generan enormes dificultades : vidas rotas, personas impedidas de trabajar, empresas privadas de empleados, asociaciones que se agotan en procedimientos disfuncionales y servicios prefectorales que luchan por desbloquear situaciones. Una situación intolerable a los ojos de un teleoperador que trabaja para la Agencia Nacional de Títulos Seguros (ANTS), de la que depende la Anef. "Ya no hay contacto directo (con los solicitantes, nota del editor) desde la desmaterialización", afirma a France 3. Según él, además de los problemas que enfrentan los solicitantes al crear sus cuentas, para el simple hecho de cambiar un correo electrónico, hay que esperar al menos tres semanas. "Algunas personas esperan más de seis meses".

Por ahora, los extranjeros tienen dificultades para obtener o renovar un permiso de residencia, incluso si el actual está a punto de expirar. Lo peor es que "los certificados de prórroga no se generan necesariamente de inmediato", precisa este empleado, que solicitó el anonimato. Esta situación desafortunada conlleva la interrupción de los derechos a la Seguridad Social, pero también el riesgo de prohibir continuar trabajando, ya que el permiso de residencia es obligatorio para poder trabajar legalmente en Francia.